Altigrafía y comentarios enviados por:
Alexander Carreño

Localización: Es un puerto de categoría especial, extenso y en su mayoría en ascenso constante que guarda mucha similitud con el alto del Vino por la Vega. Se ubica en Villeta ("Pequeña Villa"), un municipio de Cundinamarca a 91 km de Bogotá, famosa por la producción y el reinado internacional de la panela, que por su clima es un destino turístico en la región. Villeta se encuentra en un pintoresco valle conformado por las cuencas del Río Dulce y el Bituima, que se unen antes de llegar al casco urbano y forman el río Villeta. La geografía es quebrada y montañosa y se extienden al lado y lado del río hasta las cuchillas de la cordillera que encierran el Valle. El paisaje es espectacular y se compone de vegetaciones típicas de los pisos térmicos templado y frío, entre palmas al inicio, pinos y eucaliptos al final. Estamos en uno de los corredores viales más transitados de nuestro país especialmente de tráfico pesado proveniente de la costa y Antioquia.

Especificaciones: La medición comienza sobre el puente del rio Villeta a las afueras del municipio, sobre los 784 msnm y toma la vía principal que conduce hasta Facatativá, vamos a pasar por los municipios de Sasaima y Albán. La carretera está totalmente pavimentada y señalizada, pero solo tiene dos carriles y debido a esto no es recomendable llevar vehículo acompañante, por esto mi amada esposa debió esperarme en Villeta. Se recomienda hacer este recorrido bien temprano y ojalá en días festivos para escapar en lo posible del impresionante tráfico y sus ruidosos vehículos de carga.

Fuentes: Ninguna identificada, pero se pueden encontrar innumerables tiendas en la vía, donde se puede abastecer.

Comentario: La elevada temperatura, el sol y la humedad excesiva son factores que van a afectar de manera directa nuestro rendimiento. A esta altitud nuestro organismo pierde líquidos a una velocidad dramática que se refleja en aumentos en la frecuencia respiratoria y cardiaca que nos conducen a un mayor consumo energético y debemos controlarlos para no quedar colapsados o estallados a la mitad del recorrido (con la famosa pálida o pájara). Una sobre hidratación y consumo de alimentos es fundamental; así como una ropa adecuada que no te lleve a sudar más de lo normal y elementos de protección y bloqueador solar. La altimetría muestra que en 37,5 km se ascienden 1930 m, con un promedio de inclinación del 5,15% que es igual al del alto del Vino por la Vega. La dificultad radica en su extensión, los grandes desniveles no son la característica de este puerto. Se recomienda subirlo al estilo “Diesel” así como los tracto- camiones que transitan diariamente; en lo posible ir de menos a más, regulando fuerzas, con buena cadencia y con mucha paciencia. El desnivel de los dos primeros kilómetros nos van a dar una idea de lo que va a ser el resto del puerto, muy temprano encontramos la única zona plana con un descenso que se extiende por 1,6km. A partir del km4 hasta el final el ascenso va a ser constante, manteniéndose entre el 5% y el 6%, tan solo el km 19 estuvo por encima del 7% con una rampa al 10%. Desde el km 6 hasta el 22 el porcentaje de inclinación se mantiene en el 6%, luego vienen 2 km suaves al paso por el peaje de Jalisco. Miramos el registro del recorrido y aún nos queda una tercera parte, ¡esto parece una eternidad! los kilómetros parecen más largos y avanzamos muy acompasados, entonces pensamos “ya casi lo logro” pero la fiesta no termina todavía, este gigante no se rinde y aunque la pendiente en los últimos kilómetros no supera el 5%, encontramos el paso por Albán todo un calvario, el km 29 al 6,8%. A esta altura nuestro pedalear se torna pesado y la pendiente no cede, mantenemos la esperanza de encontrar una zona de recuperación, pero no hay tal; en cambio encontramos un letrero que nos indica: Alto de la Tribuna a 2 km, y esto es casi comparable a un descanso. Bajo el paso de las vías del ferrocarril finalmente culminamos el Alto de la Tribuna. Unos metros adelante hay estaderos para tomar y comer algo; de este punto se pueden bajar 6 km hasta Facatativá, en mi caso tenía que devolverme y bajar hasta Villeta, mi esposita me esperaba. Terminar el recorrido exige que tengas una buena preparación física que te permita pedalear sin descanso durante algunas horas y una buena actitud mental de calma y paciencia (conté 78 tracto camiones que me rebasaron subiendo) Si optas por el descenso, este debe hacerse con mucha precaución, pues hay que sortear los lentos camiones de carga que van bajando y en muchos sectores de la vía por sus curvas cerradas no es fácil adelantarlos, como precaución debes recordar que la fricción de las zapatas en la superficie de frenado de los aros, aumenta considerablemente la temperatura, por esto debes revisar muy bien los frenos. Algunos ciclistas profesionales hacen el recorrido saliendo por la calle 80, bajan hasta Villeta y suben el Alto y luego hasta Facatativá y terminan en Bogotá en algo más de 190 km.