Localización: Subida situada al oeste de la provincia de Teruel, donde se juntan la Serranía de Cuenca y la de Albarracín, por la carretera TE-V-9032. Si venimos de la provincia de Cuenca tendríamos que haber subido previamente el puerto de El Cubillo, para después afrontar esta subida si volvemos sobre nuestros pasos en dirección Guadalaviar. Si venimos de Teruel, o nos dirigimos desde Guadalaviar donde previamente subiremos la cara norte de esta subida, o también se puede acceder a ella por la carretera que une Albarracín con la provincia de Cuenca.
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Comentario: "Ya desde el inicio de la subida, un puente sobre un todavía “estrecho” Tajo, se puede divisar el final de la ascensión a nuestra derecha, este está dominado por una torreta de vigilancia que se puede convertir en una obsesión si llevamos muchos kilómetros en las piernas, aún sabiendo que el puerto no es largo. Los primeros dos kilómetros se circula por un paraje de pinos impresionante que se pueden admirar detenidamente ya que no encontramos nada considerable que nos haga bajar la vista y sufrir. Eso sí, si seguimos mirando hacia nuestra derecha, seguiremos viendo ese final del puerto cada vez más lejano, y piensas, esto tiene que cambiar. Dicho y hecho, tras una curva de herradura casi en el segundo kilómetro te das cuenta de que la cosa se pone seria porque ves que una carretera casi rectilínea empieza a tomar pendiente rápidamente para situarse durante más de dos kilómetros al 9% de media. Subes y subes y a pesar de que sabes que sólo son dos kilómetros no encuentras el final, y además, como estamos por la mañana, el sol nos pega de cara y lo vemos un poco mas lejos, la fuente nos despista de la carretera y cuando volvemos a la realidad, rampas de hasta el 15% nos hacen sufrir más de lo que desearíamos. Ya parece que la carretera cambia un poco de sentido y la pendiente aminora, y después de esto y un último esfuerzo para superar el 12,5%, divisamos el cartel del puerto y la torreta majestuosa sobre nuestras cabezas (ver foto) que nos hace saber que estamos en el puerto de El Portillo y a 1778m (el cartel marca 1790m). Descansamos y echamos un trago de agua, nos damos la vuelta y nos quedamos sorprendidos, un tremendo paisaje se abre ante nuestros ojos lleno de hermosura y de vida que hace que esta “locura de las cumbres” valga la pena.
Fotos: "
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