Altigrafía y comentarios enviados por:
Juan José Jiménez

Localización: El santuario de la Virgen de la Montaña, patrona de Cáceres, ofrece unas inmejorables vistas de la bella ciudad. Desde pequeños, los cacereños tenemos una especial relación con nuestra montaña que forma parte de la denominada Sierra de la Mosca. Siguiendo las indicaciones que nos marcan hacia el Parador de Turismo, llegaremos al puente de San Francisco, en el cual tomaremos dirección de la calle Mira al Río. y a continuación a la calle Fuente Rocha. La calle Fuente Concejo forma ya las primeras rampas de esta subida de poco más de 2 km, y que a continuación conforman la denominada carretera al Santuario de la Montaña.

Especificaciones: Carretera de acceso urbana de doble sentido sin arcenes, dotada de buen asfalto y con acerados e iluminación. Tráfico muy esporádico debido al carácter casi de uso exclusivo de la carretera para el Santuario. Habitual presencia de peatones por aceras. Sin sombras en todo el trayecto.

Fuentes: El trazado se encuentra completamente dentro de la ciudad y en la pequeña explanada final del Santuario existe una fuente a mano derecha además de un restaurante.

Comentario: Desde pequeños los que nos hemos criado en Cáceres, tarde o temprano intentamos con mayor o menor éxito la subida a nuestro puerto especial. Si bien las limitaciones de espacio y acceso no lo convierten en un punto especialmente significado para grandes eventos, si lo es para pequeñas gestas, esas que terminan en alto. Los inicios por Fuente Concejo, adentrándonos en la barriada de San Marquino nos enfrentan unas primeras rampas que se encuentran entorno al 10%, pero que si miramos a nuestra izquierda, hacia el oeste, nos permiten ver una imagen más que bella del Cáceres antiguo, con su muralla y su barrio judio a nuestros pies. Superada la primera herradura y la primera curva a derechas un tramo de unos 500 m al 8% nos llevará hasta la altura de la Ermita de San Antonio. A partir de aquí tendremos unos 300 m de descanso para afrontar la subida de los peores 600 m del trayecto, con el paso del depósito de agua a derecha y el calvario a la izquierda, que alcanzará pendientes del 14%. Superado este difícil y duro tramo, prácticamente en línea recta, dejando la ciudad a nuestras espaldas y la derecha, cambiará la rasante ligeramente y con dos curvas de herradura más, que nos harán volar sobre la ciudad, por la espalda de la imagen con brazos abiertos existente en la explanada del santuario habremos cumplido nuestra promesa de subida. Una vez saludada a la Patrona Cacereña, realizaremos el descenso disfrutando las vistas de la ciudad.