ZAMORA PEÑÓN, EL
Doney de la Requejada
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Altitud: 1840 m Distancia: 10,66 km Desnivel: 794 m Pendiente Media: 7,45 % Coeficiente: 197
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ZM05
Peñón, El






Localización: Es la carretera, ZA-P-2665, que une la comarca de Sanabria con la provincia de León a través de la Sierra de la Cabrera. Nuestra altimetría se inicia a unos dos kilómetros de Doney de la Requejada tras un breve descenso hacia el río, en el mismo puente.
Especificaciones: Hasta el cruce a Escuredo la carretera es estrecha y con asfalto bastante irregular. A partir de ese punto, la carretera es algo más ancha y con mejor firme, pero éste se va deteriorando según ascendemos. En el tramo final, en 2024 existen desprendimientos y un par de tramos en los que el carril derecho se ha ido ladera abajo. Y el firme en esa parte se parece mucho al de la vertiente leonesa, con baches y muchos parcheos. Ambas vertientes requieren una reparación urgente y a fondo. El pinar es frondoso hasta Escuredo, aunque no proporciona mucha sombra en las hora centrales del día y después… que no castigue demasiado el Astro Rey. Tráfico casi inexistente.
Fuentes: Hay una en la plaza de Doney, antes de iniciar la ascensión, aunque tenemos que desviarnos un poco. Otra a mitad de la larga recta de ascenso, a mano izquierda, de curiosa factura.
Descripción: Si de sufrir se trata, este es uno de esos puertos que lo consigue sin ofrecer prácticamente nada a cambio, salvo el espléndido panorama que hemos dejado atrás: Sanabria y su comarca. Sólo los tres primeros kilómetros, bajo la sombra tupida de un espeso pinar, nos dejan gozar de las maravillas de la ruta. Pero al dejar Escuredo a nuestra izquierda, la carretera se arregla para que las vistas hacia el alto no encuentren ningún obstáculo y así podamos apreciar, con disgusto, las enormes rectas que iremos superando hasta coronar. No se ha comido mucho el coco, no, el ingeniero que la trazó: lo más recto posible y dos herraduras al final para salvar el desnivel. ¡Así cualquiera...! Pero es que en ese trazado tan rectilíneo se nos hace eterno el llegar hasta alcanzar una perspectiva diferente, lo que convierte en francamente penoso y hasta aburrido el afrontar sus duras rampas, que no son tales, sino prácticamente una sola de varios kilómetros. Que nos sea leve... Ahora bien, si lo nuestro es gozar en los descensos suicidas, en pocos sitios encontraremos una oportunidad semejante: los 100 km/h están a vuestro alcance a nada que tengáis ese "punto de locura" que hace falta para alcanzar semejantes cifras. ¡Suerte! Pero no os lancéis "al vacío" sin haber saboreado previamente del grandioso panorama que desde el Mirador de la cumbre se divisa sobre el Lago de Sanabria y las tierras de alrededor.
Mapa situación:

 
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