MADRID COTOS
El Paular (Rascafría)
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Altitud: 1829 m Distancia: 13,64 km Desnivel: 674 m Pendiente Media: 4,94 % Coeficiente: 112
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MA07
Cotos




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Localización: En la M-604 que desde el Valle del Lozoya se dirige hacia la Sierra de Guadarrama, uniendo el bello pueblo de Rascafría con el puerto de Navacerrada.
Especificaciones: Muy buenas condiciones del asfalto y con señalización horizontal. Sombras de pinos y robles muy abundantes al inicio y el tráfico aumenta en los fines de semana.
Fuentes: Hay una fuente en en centro de Rascafría (justo en la plaza principal del pueblo) y otra al salir del pueblo, en el parque frente al Centro de Salud (a la izda. de la carretera). Encontraremos otra fuente en el mismo puerto, en la rampa que sube hacia el Centro de Interpretación (antigua Venta Zabala) a mano derecha, y por supuesto hay agua en Venta Marcelino, pegada a la carretera.
Descripción: Uno de los puertos más atractivos de la comunidad madrileña es, sin duda, éste que nos ocupa. Su no excesiva dureza —ninguna rampa alcanza los dos dígitos— y la generosa sombra del entorno hacen muy agradable esta ascensión a la Sierra de Guadarrama desde el espléndido Valle del Lozoya.
Iniciamos nuestra altimetría en el mismo Monasterio del Paular por un trazado totalmente recto que va ganando paulatinamente en pendiente media, llevando siempre a nuestra izquierda el río de la Angostura. Dejamos a la derecha el acceso al Mirador de los Robledos, que visitaremos en otra ocasión, y seguimos ascendiendo por esa recta interminable pero tan bien sombreada y de suaves desniveles que casi estamos deseando que la cosa continúe como está, no vaya a ser que dejemos de disfrutar del paisaje. Es zona esta de mucho dominguero que acude a gozar de un lugar tan privilegiado en sus abundantes Áreas Recreativas y Restaurantes, bien frecuentados todos ellos.
Cuando se inicien las curvas será señal de que se acaba el terreno favorable y de que deberemos empeñarnos en los kilómetros que aún nos faltan hasta coronar por encima de los 1800 m. de altitud. La pendiente ya se sitúa por encima del 5% en un primer momento, incluso con un kilómetro más llevadero, para ir poco a poco endureciéndose hasta superar en el tramo final el 6% con algún breve tramo al 8%. No es excesivamente exigente, pues, este puerto madrileño, pero suele ir enlazado con varios otros de la zona que le hacen ganar en dureza, por los kilómetros acumulados siempre en dirección al cielo.
A medida que ascendemos, los bosques van abriéndose y dando paso a las praderas de la tierras más altas. Y allí, en el cielo, la Peñalara con sus 2428 m. nos contempla como dueña y señora de estos parajes, esperando vernos coronar en el límite provincial con Segovia y dejando a nuestra izquierda la ruta que nos llevaría a la Estación de Valdesquí. También hemos podido contemplar al fondo la silueta magnífica de la Bola del Mundo, por si cuando coronemos, aún nos quedan ganas de intentar vencerla.
Al descubrir a nuestros pies la estación de un ferrocarril a estas altitudes nos parece habernos equivocado de lugar o de vehículo: ¿no hubiera sido mejor llegar hasta aquí tranquilamente sentados en cualquiera de los vagones del "caballo de hierro" y no sufrir, como hemos hecho, a lomos de nuestra "burra metálica"? Lo que no podríamos hacer en el tren es disfrutar del trazado llano hasta el vecino puerto de Navacerrada mientras respiramos el aire puro de los bosques que nos envuelven. Y éste es uno de los placeres que nuestra bien amada bicicleta y la montaña nos brindan como premio a nuestros esfuerzos.
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Mapa situación:

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