A CORUÑA IROITE
Runs
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Altitud: 679 m Distancia: 12,17 km Desnivel: 661 m Pendiente Media: 5,43 % Coeficiente: 114
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AC02
Iroite






Localización: Pasado el Ponte Goiáns a la salida de Boiro en dirección a Ribeira, adonde habremos llegado por la AC-305, cogeremos la AC-3101 hacia Noia. Al cabo de 2 km abandonaremos esta carretera para tomar una pista local, iniciándose la altimetría en un puente sobre el río Coroño.
Especificaciones: En general, y salvo los dos primeros kilómetros, disfrutaremos de un asfalto en buenas condiciones, con carretera estrecha pero sin apenas tráfico y sin señalización horizontal. Las sombras nos cobijarán tan solo desde Runs a Chans de Reis, y otro poco metros antes da Portela da Moureira.
Fuentes: No será por falta de agua que no podamos coronar con éxito en Iroite, pues serán varias las que encontraremos a lo largo de la ascensión.
Descripción: Subida un tanto atípica dentro de las del Barbanza por su longitud, pero más llevadera por los toboganes y falsos llanos que va presentando a lo largo del camino. Nada más pasar el río Coroño, entraremos en la aldea de Runs, que nos recibe con un cruceiro y una fuente a nuestra derecha. El paso por esta aldea no ofrece ninguna dificultad, pero será a su salida cuando afrontemos la primera rampa con cierta entidad que nos encontraremos en nuestra empresa. Una vez superada pasaremos por una antigua gravera, para adentrarnos en la que posiblemente sea la parte más bonita del puerto: una zona arbolada, con pinos, eucaliptos y algún roble, y la tranquilidad que se respira sobre la bicicleta.
Al cruzar por segunda vez el mismo arroyo, entraremos ya en la parte más pestosa, en la que llanearemos un poquito para, tras una cerrada curva a la izquierda, enfilar de nuevo nuestro manillar hacia el cielo. A la altura del cruce de Mosquete tenemos que pasar la primera barrera canadiense y, justo tras haberla superado, una curva de herradura y una serie de toboganes nos harán ir ganando altura poco a poco hasta llegar al lugar conocido como Fonte dos Loureiros, zona recreativa con parrillas, mesas, y una especie de piscina, antiguo abrevadero para el ganado donde los chiquillos de Boiro nos hemos bañado alguna vez. La fuente sigue ofreciéndonos un agua muy buena, pero las sombras, tras los recientes incendios, han desaparecido casi en su totalidad.
Una vez llegados a este punto, los toboganes desaparecerán para dar lugar a una pendiente constante en torno al 7%, en la que es, sin duda, la parte más fea por culpa de los incendios. Además, las maravillosas vistas sobre la ría de Arousa quedan a nuestra espalda y no podremos disfrutarlas. Por suerte, poco después volveremos a adentrarnos en una parte mucho más bonita, con árboles y corrientes de agua que, tras días de mucha lluvia, es fácil que crucen la carretera.
Poco después nos hallaremos en la Portela da Moureira, que parece el fin de la subida… pues hay que seguir subiendo. Conviene decir que este es un “balcón” sobre la ría, donde se pueden observar restos de un castro y de un cromlech, así como de la calzada romana que atravesaba la sierra. Es además en este lugar donde se juntan nuestra vertiente con la dificilísima de Cubelo. Si miramos a la derecha y la niebla casi sempiterna no nos lo impide, veremos ya la cima coronada con los radares del EVA 10.
Dejando a nuestra izquierda la aún más tranquila carretera hacia A Figueira y Noceda, continuaremos por la ruta que nos ha traído hasta aquí y un nuevo paso canadiense nos deja rodeados de ganado, mucho ganado a ambos lados de la carretera, ovejas, cabras, vacas, caballos... campando a sus anchas por la parte alta de la sierra. Es el momento de quedarnos boquiabiertos con las vistas que se nos presentan enfrente: la ría de Muros y Noia, con el Monte Louro vigilante. Una delicia para los ojos.
Tras recrearnos la vista deberemos seguir hacia la derecha, enfilando ya la base militar. Nos encontramos ahora en el comienzo de la ruta megalítica y, dejando a la derecha la aldea de Lidón, encaramos la última gran rampa, con dos curvas un tanto cerradas y otro paso canadiense. Una vez que negociemos la curva hacia la izquierda, se puede decir que ya estamos en recta de meta, aunque pica hacia arriba, junto a las instalaciones del EVA 10.
(texto adaptado de Nino Álvarez «Boirinho»)
Mapa situación:

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