Altigrafía y comentarios enviados por:
Josemi Ochoa

Localización: A un kilómetro de Bárzana en dirección al puerto de La Cobertoria, encontramos un cruce a la izquierda señalizado hacia Muriellos. Ahí situamos el inicio de la ascensión.

Especificaciones: Carretera asfaltada con buen firme hasta llegar a Muriellos. Pasa a tener firme de hormigón en las callejuelas de esta aldea y sorprendentemente vuelve a tener firme asfaltado después, aunque es un camino muy estrecho en el que apenas cabe un vehículo. Abuntantes sombras, continuas en la primera mitad, y tráfico ¿qué tráfico?.

Fuentes: Una a la salida de Rano. Hay otra antes de entrar en Muriellos, pero en verano estaba prácticamente seca y con mal aspecto.

Comentario: Una de la cuatro encerronas, junto a Tenes (o Meanes), Bermiego y Ermita de Alba, que nos presenta la vertiente sureña de la Sierra del Aramo presidida por el majestuoso Gamoniteiro. Y son encerronas porque todas ellas presentan inesperadas rampas, sobre todo en la parte final, con pendientes que superan el 20%. Y lo malo es que los inicios de estas ascensiones son muy regulares pero con pendientes medias cercanas al 10% con lo que si no regulamos, vamos a llegar bastante fundidos a esa parte final. Así que es aconsejable comenzar todas ellas con tranquilidad.
En esta ocasión, los dos primeros kilómetros tienen una pendiente media superior al 9%, pero muy regular, siempre entre el 8% y 11%. En este tramo la ruta discurre por un espeso bosque que no deja ver ni el cielo. La impresión visual no es de tanta pendiente, pero las piernas la acusan y nos dará la impresión de que vamos fatal. Al llegar a Rano, el terreno se abre un poco más y nos proporciona algunas vistas. La pendiente también disminuye algo, pero aún así la media se sitúa en el 8%. En la zona de Villarejo ya tenemos una buena vista hacia el Gamoniteiro frente a nosotros. Y al llegar a Muriellos, ya suponíamos que iba a ser duro llegar a la parte más alta. Y a fe que lo es. Primero seguimos el camino de hormigón más aparente, con rampas cercanas al 20% trazando dos herraduras. Cuando llegamos a un cruce casi en la parte más alta, no hay duda: seguir por lo más empinado, una tremenda rampa al 22% que va disminuyendo hasta dejarnos en la última casa. Y cuando creíamos que todo había terminado, vemos que sigue una estrechísima carretera recientemente asfaltada, algo que no esperábamos. Pues eso, que aún nos quedaba medio km con rampas de hasta el 18%, antes de llegar al punto más alto. Luego aún queda una fuerte rampa en descenso hasta llegar al barrio de arriba de Muriellos.