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J. Javier Marco

Localización: Iniciamos la subida justo a pie de la playa del port des Canonge y nos dirigimos por la carretera de acceso a esta zona hasta el cruce con la Ma-10. Ahí cogemos hacia la izquierda en dirección Sóller. Poco más adelante volvemos a coger el desvío a la izquierda dirección Sóller hasta coronar el Coll de Claret en una recta justo en un cruce a derecha e izquierda hacia urbanizaciones de la zona.

Especificaciones: Vamos a transitar por dos carreteras diferentes, pero en muy buen estado. Desde el inicio del puerto hasta que salimos a la Ma-10 la carretera es de unos 5 m de anchura con poca señalización y tráfico escaso, con asfalto bueno.
El tramo hasta la cima del Coll de Claret es algo más ancho, unos 6 m, bien señalizado y con buen asfalto también. Poco tráfico, algo más en verano pero sin llegar a molestar.

Fuentes: Desconocidas.

Comentario: Se trata de una subida poco conocida en la isla de Mallorca, que encierra multitud de puertos con encanto, y este es uno de ellos. En plena sierra de Tramuntana, la zona más idónea para practicar ciclismo en la isla.
Empezamos la subida junto a la playa de port des Canonge, en el punto más bajo al que se puede acceder en vehículo, y empezamos, así, “a pelo” a subir, primero atravesando la zona urbanizada y luego ya en plena carretera de acceso. Vamos a tener un primer tramo de 4 km bastante duro, con muchas rampas al 10% y una máxima al 14%, pero lo que más nos va a sorprender va a ser el trazado de la carretera. Desde el primer km hasta el km 3,8, donde tendremos un descansito en forma de pequeña bajada, vamos a atravesar nada menos que 20 herraduras, 18 de ellas totalmente enlazadas en un tramo de menos de 2 km, y atravesando un bonito bosque de pinos que sin duda nos hará muy agradable la subida pese a la relativa dureza que tiene.
Llegados al descansito, bajaremos durante 500 m para tener seguidamente otro tramo de 500 que se agarra mucho y con otras 5 herraduras hasta llegar al cruce de la MA-10, donde la cosa suavizará mucho. A partir de este punto, tendremos un tramo de 500 m muy suave hasta el cruce a Esporles, que nosotros cogeremos a la izquierda dirección Sóller. Pasado este cruce, nos quedarán 3,5 km hasta la cima, con pendientes entre el 4 y 6%, con un par de herraduras y algunos puntos donde gozaremos de unas vistas espectaculares.
Sin duda, un puerto que no nos defraudará en absoluto y al que querremos volver, como a muchos otros de esta zona de Mallorca que encierra verdaderos tesoros.