Localización: En el suroeste de la provincia de A Coruña, en la Sierra del Barbanza, concretamente en el concello de Lousame cogeremos la AC-308, para en Augasantas girar a nuestra izquierda y pasar a coger la AC-7402.
Mapa por donde transcurre la ascensión.
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Especificaciones: Carretera en perfecto estado, con señalización vertical y horizontal. Escaso arcén por no decir inexistente y tráfico más bien escaso. Al pasar Augasantas, el tráfico aumenta un poco, la carretera se estrecha y desaparece la señalización horizontal. Las sombras nos acompañarán durante buena parte del trayecto. Desaparecerán en la parte alta.
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Comentario: Subida fácil de realizar, con tan solo 2-3 kilómetros que encierran algo de dureza. Es muy tranquila y además transcurre por una bella zona por lo que es agradable de realizar; no en vano, es una carretera frecuentada por ciclistas profesionales de la talla de Ezequiel Mosquera. Como ya he mencionado anteriormente, esta subida se inicia en Portobravo, en Lousame, aunque se puede venir desde Noia, la cual se encuentra muy cerquita. Esta ascensión transcurre en paralelo al río Vilacoba, de gran belleza y con una ruta de senderismo que recorre toda la zona, visitando la gran cantidad de fábricas de papel que había en esta zona, y que si tenemos oportunidad de hacer, no la deberiamos desperdiciar. Entera son 25 kms. pero merece la pena. En cuanto a la ruta marcada para la bici, también merece la pena. Es una subida típica para calentar piernas antes de afrontar mayores empresas, o para ir charlando con algún compañero tranquilamente, mientras realizamos deporte. Como se ve en el gráfico, la dureza es más bien escasa, tan solo los tramos entre las aldeas de Vilacoba y Comparada ofrecen algo de dureza y el resto es muy llevadero. La mayor pega nos la puede ofrecer el viento al pasar la aldea de A Senra, ya que el arbolado casi desaparecerá y quedaremos a merced de los vientos, que aquí suelen ser fuertes. Los pasos de las aldeas tampoco ofrecen mayor problema, como siempre por esta zona, los perros tumbados en mitad de la carretera pueden ser nuestra mayor dificultad.
Comienzo de la ascensión dejando la antigua papelera de Brandía a nuestra izquierda.
Como vemos aquí, las sombras son abundantes
Los numerosos arroyos y riachuelos que horadan esta tierra hacen que la carretera ofrezca varias curvas de herradura.
Las rampas duras, para otro día. Hoy de tranquis.
Esta subida tiene muchísimas curvas, las rectas son escasas.
Aunque no haya rampas excesivas y su descenso no sea muy peligroso, el casco siempre en la cabeza, no como éste que baja.
Es frecuente encontrarse con otros cicloturistas que disfrutan de la tranquilidad de estos parajes.
Al dejar atrás Vilacoba, nos encontraremos las rampas más duras.
Los eucaliptos, además de su olor característico, nos ofrecerán buenas sombras en los días de estío.
Justo antes de llegar a Augasantas, desaparecerá el arbolado y las curvas, para dar lugar a campos de labradío (maizales en este caso) y las pocas rectas que hay a lo largo de toda la subida.
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