Localización: Desde la LZ-2 dirección Playa Blanca, tomamos un desvío por la LZ-703 en dirección a las Breñas. Remontamos esta ruta hasta llegar a otra rotonda, donde no hay duda posible, a la izqda. Sobre la pared de la montaña descubriremos el pueblecito de Femés.
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Especificaciones: Carretera en buen estado y sin tráfico hasta la rotonda final. El km final desde esta rotonda se realiza por una carretera más estrecha, sin arcén y con mucho tráfico. Afortunadamente, la gran mayoría son turistas que encuentran otro punto de interés adicional en el loco que está subiendo semejante desnivel en bicicleta
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Comentario: Esta es, sin lugar a dudas, la ascensión más complicada de la isla. Desde el cruce de la LZ-2 ascendemos apaciblemente hasta el pueblito de Las Breñas. Lo atravesamos sin rampas de entidad, hasta que a la salida del pueblo empiezan a ponerse la cosa más seria. No obstante, no será hasta después de un descansillo cuando venga los primeros desniveles importantes, de hasta el 12%, que nos servirán para llegar a la segunda rotonda. Y desde aquí, como reza en el Angliru, empieza el Infierno. Son solo 800 m, de una carretera rectilínea con un par de curvas de herradura en sus últimos 100 m, pero a una pendiente media del 13% y con puntas del 18%. Por si el desnivel fuera pequeño, también los alisios, los famosos vientos húmedos del Norte, ponen su granito de arena soplando con gran violencia en contra en este tramo final para complicar más si cabe la escalada de esta rampa. Finalmente se alcanza el pequeño pueblo de Femés, literalmente colgado sobre el borde del acantilado. Desde este punto se tienen unas magníficas vistas del Sur de la Isla y de Fuerteventura en el horizonte.
La vertiente opuesta recorre el valle de una manera suave, y aunque tiene un principio violento, 1,5 km alrededor del 8%, posteriormente y como se ha comentado suaviza considerablemente.
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