Altigrafía y comentarios enviados por:
Josemi Ochoa

Localización: En Elorrio, tomamos la BI-4314 que lleva al barrio de Mendraka. El inicio lo situamos en una pequeña rotonda 50 metros a la izquierda de la plaza de la iglesia, en la confluencia de las calles Nizeto Urkizu y Bukantz. Salimos por esta última en dirección N.

Especificaciones: Carretera amplia, sin señalización horizontal y asfalto en perfectas condiciones. Se estrecha en los últimos 200 metros y el final tiene firme de cemento, aunque en buenas condiciones. Prácticamente no hay sombras y el tráfico es casi inexistente.

Fuentes: Habrá que aprovisionarse en Elorrio, ya que no hemos visto ninguna durante la ascensión.

Comentario: Otra ascensión que nos lleva hasta un barrio de Elorrio, villa fundada en 1356 que reiteramos merece una visita detallada. En este caso se trata del barrio de Mendraka, situado al N de la villa. Lo más notable de la ascensión es que en el km 1,5 pasamos junto a la ancestral necrópolis de Argiñeta, lugar que imperativamente deberemos visitar en el descenso. Se trata de una veintena de sepulcros de piedra, con una base rectangular vaciada de forma antropomorfa y una tapa de sección triangular, a modo de tejadillo, además de unas cuantas estelas funerarias. Fueron reagrupados en este lugar en el siglo XIX, ya que hasta entonces estaban junto a las ermitas de los diferentes barrios (Berrio, Miota, Mendraka...). De hecho, frente a la ermita de Santo Tomás, final de nuestra ascensión, aún se pueden ver algunos sepulcros similares. Su antigüedad se fecha entre los siglos VI y X, siendo las estelas las piezas más antiguas, de la época precristiana. Algunas tapas, probablemente las más recientes, tienen inscripciones en un latín un tanto singular. Una de ellas reza así: “In De(i) Niomine Momus in corpore bibentem/ in era DCCCCXXI mi fecit/ ic dormit”. Trad.: “En el nombre de Dios Momo viviendo en el cuerpo, en la era 921. Aquí duerme”. Es por tanto del año 883. Junto a estos sepulcros se erige la un tanto atípica ermita de San Adrián que parece ser fue construida en el S. XVII, sobre otra anterior. De hecho, a finales de 2010 se han descubierto restos de un poblado junto a la ermita, que podían datar de los siglos VIII o IX.
En cuanto a la ascensión, es bastante cómoda salvo los 150 metros finales. Toda ella discurre entre caseríos y prados, sin prácticamente zona boscosa. Eso nos permitirá unas buenas vistas del macizo del Amboto y del Udalaitz. El primer km es muy suave, pasado el cual hay una zona muy puntual del 10%. A partir del km 1,3 ya no bajaremos del 7%, aunque tampoco llegaremos a los dos dígitos hasta la rampa final. Esta llega al arribar al barrio de Mendraka y girar a la izquierda para ascender entre caseríos hasta la ermita de Santo Tomás. Allí terminaremos al final de una rampa de cemento que asciende por detrás de la citada ermita y donde puntualmente llegaremos al 20%.

Mapa de situación


Inicio de la ascensión , cien metros a la izquierda de la iglesia de Elorrio .


Suave pendiente saliendo de Elorrio.


Poco a poco va aumentando la pendiente.


Todo está perfectamente señalizado.


Tras una amplia herradura, dejamos a nuestra izquierda la necrópolis de Argiñeta.


Otra amplia herradura, dando vista a Mendraka, con el Amboto al fondo.


Dentro del barrio, tomamos la carretera a la izquierda (no hay duda: la más empinada).


Ascendemos entre caseríos, robles y hayas...


...hasta el final de esta dura rampa de cemento detrás de la ermita de Santo Tomás.


En el descenso visitamos la ermita de San Adrián...


...y la necrópolis de Argiñeta.