Localización: Salimos de Burgohondo por la AV-900 en dirección a Ávila tras pasar por el pueblo que da nombre al puerto. |
Especificaciones: Carretera en perfecto estado con señalización horizontal hasta la cima. No hay sombras y el tráfico, muy escaso. |
Fuentes: Una al de 100 m del inicio a la izquierda. En Bugohondo hay al menos otras dos un tanto escondidas en los parques. Otra más en la curva de entrada a Navalmoral y había otra a 2 km de la cima pero parece que ha desaparecido con la ampliación de la carretera. |
Descripción: Estas “tierras de nadie” fueron repobladas en la Reconquista por gentes venidas del norte. Tal es el origen de Burgohondo, pueblo asentado en lo más profundo del barranco y que fue bautizado como “Burgo del Fondo”. Este bello municipio queda limitado al Norte por las estribaciones de la Sierra de la Paramera, cuyas cumbres más elevadas rozan los 2300 metros y conservan las huellas dejadas por la intensa erosión de los glaciares cuaternarios. En sus laderas nacen el Adaja, el Corneja y el Alberche que se cruza por un largo y vetusto puente de tres arcos semicirculares. Al sur está protegido por la Sierra de Gredos, lo que le hace contar con un microclima ideal para la producción de hortalizas y frutas de gran calidad, en especial sus uvas y melocotones, apreciados en toda España por su gran sabor. Desde ese “fondo” y tras proveernos de alguno de ellos, vamos a remontar la Sierra de la Paramera donde se ubica la población que da nombre a este puerto tan transitado en numerosas ediciones de la Vuelta a España, Navalmoral de la Sierra. Esta denominación deriva de “nava” o majada de pastores y tierra de buenos pastos y de “moral” por los numerosos que en el pueblo había. Sus vecinos aparecen citados en un documento del siglo XIII como “omes buenos” y bien que lo deben ser en estas tierras tan dadas a la austeridad y a la calma, aunque no así los bandoleros que intentaban aprovechar el importante tránsito de hombres y mercancías que frecuentaban las diversas ventas del recorrido. A ello se debe sin duda la mención a una prisión de paso, antes de continuar camino en dirección a Ávila. Pues bien, nuestro paseo hasta el alto, por estas tierras que no dejan de hacer historia –ahora en bicicleta, que los tiempos son otros-, nos va a suponer algo más de una hora de tranquilo pedaleo en sus más de 15 km con pendiente mantenida entre el 4 y el 5% y rodeados por la escasa vegetación de los páramos que dan nombre a la sierra. Lugar inhóspito, no excesivamente duro, pero que nos ha brindado siempre momentos de ciclismo de calidad. A cambio, la perspectiva sobre el valle del Alberche, primero, y sobre el núcleo de Navalmoral, después, nos ofrece un espectáculo grandioso en su inmensidad. |
Mapa situación:
La mayoría de los mapas están obtenidos del MAPA DE CARRETERAS editado por el Ministerio de Fomento o de Google Maps
|
© |
|