| Especificaciones: Carretera amplia, con señalización horizontal (algo borrada en alguna zona) hasta el embalse de Aixola. Estrecha y de hormigón alternando con asfalto, en la parte que rodea el embalse. En esta zona hay una serie de canaletas de desagüe que cruzan la vía, que son un tanto molestas. De ahí al final, pista de hormigón en buen estado. Abundantes sombras excepto en los dos últimos km. Tráfico escaso hasta el embalse, limitado a gente que sube a pasear por la zona, y nulo hasta Elgeta, ya que está prohibido el paso a vehículos no autorizados. |
Descripción: Ascensión absolutamente recomendable para quien goce con recorridos tranquilos a través de parajes naturales sin excesiva intervención humana. Es además absolutamente excepcional que este paraje se encuentre en una zona tan sobreexplotada desde el punto de vista urbanístico e industrial como lo es la comarca de Ermua-Eibar. Solo durante unos cientos de metros al inicio, pasaremos por una zona industrial. Y una vez rebasado el barrio de Eitzaga, el panorama cambia radicalmente, ya que nos metemos de lleno en la naturaleza, sin tráfico y tan solo con algún caserío aislado. Probablemente ello se deba a que la carretera solo conduce al embalse de Aixola, presa construida en 1985 para surtir de agua a Eibar. Posiblemente, antes de esa fecha solo existiría un camino vecinal hasta Elgeta. Repetimos que es una ascensión que nos encantó. Nos llamó la atención la gran cantidad de lagartijas y algún lagarto, que tomaban el sol sobre el hormigón en el tramo entre el embalse y Elgeta.
El primer km lo forman un par de toboganes que, junto a la autopista y sin apenas pendiente, nos llevan hasta el barrio de Eitzaga. Aquí, tras cruzar bajo la autopista, nos encontramos con un cruce donde seguimos por el centro, por la carretera más ancha. La pendiente aumenta, situándose en cifras cercanas al 7%, a través de la amplia carretera en perfecto estado que discurre por una ladera boscosa, con un barranco a la derecha. La pendiente más fuerte de este tramo la encontramos mediado el tercer km, en las proximidades de un bar aislado, donde encontramos zonas que rozan el 10%. Luego decrece un tanto hasta llegar a la presa del embalse de Aixola. Comienza aquí un tramo llano de más de un km por la orilla de dicho embalse, en un bonito paseo inmersos en la vegetación que apenas nos deja ver el agua en algunas zonas. Mediado este tramo encontramos una fresquísima fuente a la izquierda. Al llegar a la cola del embalse, describimos una curva alrededor de una casa, antiguo molino, que posee un arado como decoración, ubicado, extraño lugar, en el tejado. Comienza aquí un ascenso, suave al principio, junto a un refrescante arroyo, hasta que nos encontramos con la rampa más fuerte de la ascensión. La pendiente máxima es del 18%, pero en un tramo muy corto, con lo que se supera bastante bien a poca preparación que se tenga. Y si no, podemos disimular parándonos en la fuente que hay a mitad de la rampa. Tenemos después un km muy suave hasta llegar a un caserío y, tras una corta rampa, a otro en ruinas, desde donde ya damos vista a Elgeta. Lo que queda hasta el final es una sucesión de tramos suaves con cortas rampas, que nos llevan hasta la iglesia, punto final de nuestro ascenso en la intersección con la carretera que lleva a Eibar y por la que podemos seguir ascendiendo hasta el alto de Karabieta. Solo queda visitar Elgeta, con el curioso paso de la carretera bajo un arco a través de los edificios y volver atrás o seguir ruta por cualquiera de las cuatro carreteras que de allí llevan a Elorrio, Arrasate, Bergara o Eibar. |
GIPUZKOA
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Altitud: 472 m
Distancia: 6,55 km
Desnivel: 316 m
Pendiente Media: 4,82 %
