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| Localización: Justo en el km 10 de la CA-256 que desde Ramales de la Victoria se dirige a La Gándara, tomamos el desvío a la izquierda señalizado hacia Villar. Descendemos un trecho, cruzamos el río Gándara y 200 m después, en un puente sobre un arroyo, comienza la ascensión. |
| Especificaciones: Carretera bastante amplia con señalización completa hasta Villar estrechándose un poco hasta Sicuetos. A partir de aquí desaparece la señalización horizontal y el firme se vuelve más irregular aunque sin mayores problemas para el ascenso. Desde el empalme con la CA-256 en La Gándara hasta el final, carretera perfecta. Hay tramos con sombra, menos de los que cabría esperar, pero repartidos. El tráfico es prácticamente nulo. |
| Fuentes: Probablemente haya alguna escondida en alguno de los barrios por los que pasamos, pero solo hemos visto una, un tanto atípica, al salir de una casi curva de vaguada en el Km 7,5. Así que mejor ir surtidos de líquido. |
Descripción: Ascensión un tanto desconocida, pero una agradable alternativa para descubrir la otra ladera del bonito valle de Soba, en lugar de seguir la CA-256. Bastante más irregular que la que sigue esta carretera, es algo más dura, a pesar de que el coeficiente de dificultad es casi igual; pero para una comparación real habría que añadir los dos kilómetros que hay desde Regules hasta el punto de inicio y además un perfil tan irregular queda penalizado por el cálculo por kilómetros completos del coeficiente. En cualquier caso, no se puede decir que sea una ascensión dura. Pasaremos por una serie de barrios dedicados casi al cien por cien a la ganadería, ya que no en vano Soba es considerado el corazón de la Cantabria ganadera.
La ascensión presenta bastantes tramos con características muy diferentes. Hay algún cruce que puede inducir a error, pero están señalizados. Los dos primeros kilómetros son los de mayor pendiente media, por encima del 6,5%, con la mejor carretera y un enlazado de seis curvas de herradura, lo que nos permite unas estupendas vistas, hasta llegar a la aldea de Villar. En la primera herradura habremos dejado a la izquierda el cruce hacia Rehoyos y más aldeas, otra escondida ascensión por estrechos caminos asfaltados que, si no nos perdemos, nos conducirían hasta Fresnedo en la ascensión a Los Tornos por esa vertiente. En Villar viene un tramo de descanso antes de enfrentarnos al repecho más duro de la ascensión al paso por Sicuetos. Tampoco es algo que deba asustarnos demasiado, ya que solo es poco más de medio kilómetro con una pendiente media del 10,5% y punta del 16%, pero sí tomarlo con calma porque se presenta de improviso y no se ve dónde acaba. Tras él, a disfrutar del paisaje; un nuevo descanso y un km suave, ya por carretera más estrecha hasta Bustancillés. A partir de aquí, un falso llano de casi cuatro kilómetros, hasta un poco después de Valcaba, para iniciar el ascenso al 6% de media hasta el cruce con la CA-256, pasando por Cañedo. Ya solo queda ascender otro kilómetro, entre prados, casas y cabañas, hasta encontrar la carretera de La Sía, descender un poco y un corto y suave ascenso para llegar al alto. El mirador, unos metros después, desde donde hay unas increíbles vistas hacia el Valle del Asón. |
| Mapa situación: |
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689 m
11,65 km
467 m
4,01 %
