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| Localización: Estamos en el valle del río Guadalfeo, en las Alpujarras granadinas. Iniciamos la ascensión en el puente que lo atraviesa por la A-4130 que une Almegíjar con Torvizcón, dirigiéndonos a este último. Salimos al poco a la A-348 y junto al cartel que nos da la bienvenida al pueblo, giramos a la izquierda hacia La Contraviesa, coronando poco antes del cruce con la GR-5204 que recorre el cordal de dicha sierra. |
| Especificaciones: Carretera en buen estado, con un ancho que oscila entre los 4 y los 5 m, salvo en el corto tramo por la A-348 que es algo más ancha. La señalización horizontal desaparece cuando tomamos el cruce en Torvizcón. No existen sombras en todo el puerto y es muy raro encontrarse con algún vehículo de motor. |
| Fuentes: En el núcleo de Torvizcón, aunque no llegamos a atravesarlo, existen varias fuentes: más vale ser prevenidos. |
Descripción: Pedro Antonio de Alarcón describe la Sierra de la Contraviesa como una pantera enorme y dice de ella que “es la espina dorsal de la Alpujarra, el eje de su esqueleto, lo que la quilla en un barco, vuelto lo de abajo arriba”. Para subirnos a los lomos de la fiera quizás sea esta, que pasa por la localidad de Torvizcón, la posibilidad menos transitada de todas y por ende la más apetecible para “los locos de las cumbres”. La subida hasta el pueblo desde el Guadalfeo está dividida en dos tramos, uno primero de algo más de 1,5 km aderezado por cuatro herraduras, y un segundo de corto y suave descenso hasta su entrada. Torvizcón conserva todo el encanto de los pueblos alpujarreños. Acostada en la ladera norte de la Sierra de la Contraviesa, sus casas relucen bellamente enjabelgadas apiñándose rambla arriba. Y aquí empieza lo bueno.
Efectivamente, las primeras rampas alcanzan puntas bien por encima del 15% que nos ponen sobre aviso. Durante casi 7 km la pendiente media se situará en torno al 8% y ello a pesar de múltiples y largos descansillos. La carretera, además, se va a estrechar tomando un cariz tan tortuoso que podría decirse que el verdadero puerto empieza aquí. Tras varias curvas de herradura nos disponemos a rodear un cerro que se corona en la denominada Loma de la Señora. Pasaremos por una zona especialmente rica por la manta de almendros que abriga el altozano. Solo tras 3 km de intensa subida la carretera concede una tregua seria para incrementar su dureza justo cuando empezábamos a recuperarnos. Afrontamos, enlazadas, una terna de herraduras con fuerte pendiente y magníficas vistas sobre la rambla de la Barbacana y, más lejos, la Sierra Nevada. Al alcanzar la cuerda de la montaña seguiremos trepando por la cresta de una loma cubierta de más almendros. El trazado casi rectilíneo de la ruta se esfuerza por evitar los rodeos previos, lo que se traduce en una acentuada pendiente prácticamente constante. Así coronaremos la Loma de la Señora, donde un falso llano da entrada a la zona más irregular del puerto en la que alternaremos descansillos, subidas y descensos, pero siempre con rampas de entidad en busca del alto, para dejarnos caer, con algún susto de nuevo, hasta el cruce con la carretera que recorre el lomo de la pantera hasta Haza del Lino, entre los afamados viñedos de la sierra de la Contraviesa. |
| Mapa situación: |
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1282 m
12,01 km
722 m
6,01 %
