Comentario: Nos encontramos en la aproximación a Obejo desde el Embalse del Guadalmellato para poner a prueba nuestras fuerzas en la subida a Arroyo Hondo, pero antes de iniciar las rampas de este duro ascenso habremos de superar las exigentes rampas de este corto puerto que, ineludiblemente, se interpone en nuestro camino. El enclave, pese al calor estival, posee gran valor natural hasta el punto acoger lobos y linces que viven en libertad en las proximidades de las masas de agua cercanas. Para más detalles os remitimos al enlace anterior. Comenzamos en el cruce hacia la central hidroeléctrica a los pies del dique. El primer kilómetro, quitando la rampa inicial, es muy suave ya que en buena parte transitamos por vía que cruza la presa. Será al salir de ésta cuando afrontemos el tramo que nos ha hecho decidirnos por publicar esta altimetría: rampas de hasta el 14% en un kilómetro a casi el 10% de media no son nada desdeñables. Un par de herraduras aderezan el repecho. El embalse, trazada la segunda paella, quedará a nuestras espaldas cuando encaremos una recta en dirección Sur hasta que, tras un doble giro a derechas cambiemos de rumbo y de ladera. En este punto la pendiente, que ya ha ido paulatinamente descendiendo, se convertirá en un falso llano hasta coronar el collado, perfectamente visible pese al curveo final. Lo mejor, pese a lo bacheado del piso, serán las vistas del embalse de que gozaremos en el descenso.
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