Altigrafía y comentarios enviados por:
Marcos Folgueira

Localización: En el municipio lugués de Chantada, en la aldea de Belesar y junto al río Miño. El acceso se hace desde el lado de O Saviñao, bien por la carretera LU-P-1804, que es la misma que se usará para la subida, o bien accediendo por el sur por la LU-P-5819. Sea como sea tendréis que cruzar el río Miño en el puente de Belesar, para poco después dar comienzo al puerto rodeados de viñedos.

Especificaciones: Carretera estrecha, pero con un aglomerado en perfectas condiciones. El tráfico es escaso y no hay muchas sombras.

Fuentes: Hay una en Alemparte.

Comentario: Del municipio de Chantada ya he hablado en la altimetría del puerto de O Faro. Sin embargo, me gustaría hacer algún comentario sobre la zona por la que pasa el puerto de esta altimetría. Como por ejemplo que la mayor parte del puerto coincide con un tramo del Camino de Santiago, en su versión de camino de invierno. Otra curiosidad es la de la aldea de Belesar, lugar donde arranca el puerto, y que sin llegar a tener la singularidad de Os Peares, tiene la circunstancia de pertenecer a dos municipios. Al este de río Miño está la Belesar de O Saviñao y al oeste la de Chantada. Esta aldea fue el lugar de paso desde antiguo entre la comarca de Chantada y las Tierras de Lemos, testigo de lo cual son los Codos de Belesar, restos de la vía romana que comunicaba Braga con Astorga. Hoy en día es una aldea con gran encanto que tiene algo de turismo, sobre todo por el embarcadero desde donde se puede hacer varias rutas fluviales por el río Miño.
Éste no es un puerto para nada exigente y la verdad es que se me antoja como un perfecto puerto para el cicloturismo. Partiendo del entorno sosegado de Belesar, junto a un plácido río Miño en la cola del embalse de Os Peares, el trazado del puerto cruza un mar de viñedos a través de una carreterita que en sí es un mirador de esta zona de la Ribeira Sacra. Un trazado que cruza laderas repletas de bancales usados para salvar la pendiente para el cultivo de la vid, y varios lugares donde dormir, comer y degustar los caldos de la tierra en las adegas (bodegas en gallego).
El puerto de Líncora cuenta con una altigrafía de cierta regularidad, marcada por un pequeño corte en medio en forma de descansillo. Pese a contar con algunas zonas y rampas puntuales donde se alcanza una pendiente de dobles dígitos, se trata de un puerto de escasa dificultad. Algo que apoya más mi tesis de un puerto muy apropiado para el cicloturismo.

Belesar y su puente para cruzar el río Miño acogen el inicio del puerto.


En el margen derecho del río Miño, y por donde asciende el puerto, está la iglesia de Belesar. Otra curiosidad es que la parte de Belesar que está en el municipio de Chantada forma su propia parroquia. Sin embargo, la parte de Belesar que está en el vecino municipio de O Saviñao pertenece a la parroquia de Diomondi.


Metros después de cruzar el puente y junto a las últimas casas de la aldea de Belesar comienza el puerto.


Una de las zonas más duras del puerto son sus primeros 1,6km, donde hay salvar un desnivel de 126m y una pendiente media bastante regular de casi el 8%.








Como decía, el puerto es un auténtico mirador. Al igual que lo son muchas de las pequeñas construcciones con balcón que hay entorno a los viñedos.








Hay una bajada en la intensidad de la pendiente al pasar esos primeros 1,6km.


Que vuelve a aumentar al paso por A Ermida, lugar donde hay un par de adegas (bodegas en gallego).


Al dejar atrás As Ermidas os encontraréis con el principal descansillo del puerto.


Hay que retomar temporalmente la pendiente ascendente después de esta curva de vaguada.


Y tras otra pequeña zona llana al paso por Vilanova regresa la pendiente, esta vez en otro tramo largo de 1,8km con una pendiente media de casi el 7,5%. Eso sí, esta segunda zona “exigente” del puerto cuenta con algún descansillo pequeño.